Manifiesto

Creemos que la Tierra no nos pertenece, sino que nos ha sido confiada.

Somos mayordomos, no dueños. Guardianes, no conquistadores.
Hemos recibido un mundo lleno de belleza, equilibrio y vida… y tenemos la responsabilidad sagrada de protegerlo.

Nos inspira el mensaje de Jesús, quien enseñó a servir, a cuidar y a amar.
Desde esa verdad, entendemos que el cuidado del planeta no es una moda, es una misión espiritual.
Es una respuesta de gratitud hacia el Creador y de amor hacia cada ser que habita esta Casa común.

Reconocemos que todos, sin importar religión, origen o creencias, compartimos este hogar.
Y que todos estamos llamados a hacer algo. Desde lo más pequeño hasta lo más trascendente.

Nos comprometemos a vivir con consciencia, a reducir nuestro impacto,
a enseñar, aprender, sembrar y restaurar.

No buscamos imponer, sino invitar. No pretendemos señalar, sino sumar.

🌱 Porque cuidar la Tierra es una forma de amar a Dios.
🌎 Porque cuidar la Tierra es una forma de amar al prójimo.
🕊️ Porque cuidar la Tierra es una forma de sanar el mundo.

Somos Mayordomos de la Creación. Y este es nuestro llamado.